27.4.24

Lo viejo

 Esto será viejo también:

Las manos, la piel, los truenos:

Nuestra forma de pensar:

Nuestra forma de amar:

Todo sobre los verdes campos:

Todo bajo la roja sangre:

Quién dirá, acá fue, allí:

Lívidas aureolas cabalgando a los reyes:


Nosotros seremos viejos,

y lo que viene será viejo,

y lo que fue estará callado.


Acabo este poema 

siendo un viejo joven,

acabo este poema

siendo un nuevo anciano.

29.2.24

Baba

Un agujero negro. Un agujero blanco.
Uno es negro, el otro, blanco.
Babilonia se suicidó por mí, por todos.
Le debemos la vida.
El reloj, las analogías, lo críptico y lo literal,
juntan los cadáveres
de mis palabras.
La niña gira a mi lado, inocente. Desconoce el mito y la ausencia,
sólo grita o llora, porque pende de un cordón umbilical seco:
Mi cabeza, seca. Mi boca, seca. Mi grito, seco.
La poesía muerta.


¿Yo? En el umbral de los que esperan
la sentencia de un amor despedazado.

Me fui para siempre,
pero jamás volví a llegar.