25.4.16

La caminata

Las manos no las cruces sobre las mías:
Caminemos en esta avenida llena de humo,
con ese silencio de los que se saben perdidos:
Si hablas, vas a quemar algún que otro recuerdo,
o materializar algún que otro deseo:
Mejor caminar callados, así, que tu perfil de diosa
se contraponga al cielo hollinado y me diga:
Camino al lado tuyo:
No patees las latas de gaseosa ni los volantes
que reposan como testamentos de una o varias existencias
en el duro cemento:
Pruebas materiales, la materia (hylé. ¿Griega la existencia?),
son parte del universo observable que nos rodea:
Podemos recogerlos y hacer un monumento:
Y colocar al pie del mismo:
"Aquí yacen todos los que fueron y son y serán,
hasta el fin de los tiempos".
De ti me encargaré yo de recordarte,
antimateria que caminas al lado mío:
No necesitas estos juguetes modernos para existir:
Contraexistes, te contrapones al sentido lógico:
Eres lo que da balance al mundo:
Mundo de materia,
eres su contraria:
Y ahora camina conmigo para negarme de la realidad,
para atomizarme,
para llagar mi carne blanca y triste:
Nuestro dilema amoroso ha sido repetido incontables veces,
y sus resultados son variables:
Lo innegable es que la locura yace intocada en el vórtice de nuestras variaciones.