En el silencio todo se escribe o se olvida,
todo se recuerda, todo es nada, nada es todo:
La palabra cruza el estómago del día,
la medianoche se cierra como una mano
que ha dejado de escribir:
Hay afuera tierra molida a golpes y sueños en sus partículas:
Así como el viento la levanta,
la sangre levanta los sueños
y los transporta a la esfera de la realidad:
Allí todo es invierno,
todo es pregunta:
La capilla tañe su campana
y el péndulo del tiempo corrige
las sombras y las esperanzas:
Hombre, carne de piedra,
hombre que sueña es como un lobo
que sin dientes caza en las estepas,
mientras la presa se evapora en el horizonte de la certeza:
Animal, flor en llamas,
aquí hay cientos o miles de huecos
donde asoman las cabezas las ratas:
Silencio, dios desollado,
aquí escribes sin páginas ni tinta,
mientras a la muerte la fecunda un poema:
Usted, lector, es su hijo.