15.7.13

Acto 7

[Primera voz]

Nada perturbaba mi sosiego de hombre ya casi muerto
domado por la fuerza tenaz de las palabras tejidas
con oro en su boca de diosa se aferró a mi alma como
una araña de juguete mientras perdía de vista los
colores del mundo imposible posible declaración no
olvidable pilares florales de este templo en declinación
sangrientaza tan suyo que no me voy sin quedarme
en ella ahora lo sé realmente lo sé rebatiéndome entre
la frontera negra y su amor sus dedos buscándome
como si se hubiera ido la última luz para encontrarme
sin muerte con los ojos devorando hasta el rincón más
lóbrego del amor.


[Segunda voz]

 Guardián de mi vida no te levantes que el fuego
se está yendo siente mis manos esencia de mi
entrega que ya se va la luz y se quedan las cenizas
tiembla tu boca plural rendidas mis manos entregadas
saltan las venas en mis manos por acariciarte quédate
catálogo carnal deletreado con mis ojos mujer soy
empotrada en tus dedos que escupen lejos alguien
fusilería despedazadora que ha rajado nuestras palmas
tu palma siente hombre mío mi mano ciega voraz
tus manos que se me mueren hombre amante mío
piensa el alimento ciego de mis senos leche y sus bocas
cerradas centurión mudo de labios temblando casi ya
ciegos ojos del universo palma alimento de los ojos
boca tuya centurión universo que te me vas en la sangre
en el suelo salta hacia mi gruta cálida con guardianes
de mármol siente no huyas amado las arterias
se cosen se rehílan mi amor dentado descose a la muerte
gruta del alma acurrúcate en mi delicadeza cabes en
mi vientre de la vida autóctono de tu sal ondulaciones
marítimas espasmos idos y vueltos a mí tuya
búfalo de fuego y pasto calador de mis grietas barro
perfecto tatúate en mí soy tu vientre cama sin muerte
coleccióname la sangre en la cama de mi vientre no
mires el fin como lo conocen la pereza y la vigilia
aférrate a mis manos y mis se van mis palabras
salen desbaratadas indefensas mis palabras tus palabras
hablan dentro de mi boca cómo late furiosa el alma
derramándose empapando toda la sangre que entregaste
empapando y empapando ese cuerpo que entregaste
con el alma mi dios el comienzo dorsal en la espina
magnífica ya traspasada en mis ya inútiles manos
y veo del sueño te deslizas
como dejándote a un lado dócil cruzado
al sueño de mi vientre cama de sueños,
al sueño de mi vientre cama de sueños…



[Se va apagando la primera voz]